Aún después de perderlo, vuelvo a encontrarlo a él, bajo la atenta mirada buscada, para hacernos observador y observado, sin más anhelo que la captura del tiempo presente....por siempre.
Picasso: “Mujer de tocado alto”, 1904. Gouache sobre cartón. Chicago, Art Institute.
No hay comentarios:
Publicar un comentario